Mi vecino Totoro es una películas más personales de Miyazaki. La más amada por los niños. Y —para muchos adultos, entre los que me cuento— una de sus obras cumbres.
Ambientación: Japón, en zona rural. Epoca indeterminada, presumiblemente mediados de siglo XX: no hay televisores en las casas, y hay varios rasgos de cultura "tradicional", en armonía con el tono, muy feliz pero levemente nostálgico, que evoca recuerdos de infancia.
Observese la amble forma redondeada de su cintura.
...y así cae la posibilidad de publicar un "autorretrato de Milo Temesvar con Totoro"
ResponderEliminarlo que sería excelente,considerando que la característica primordial de los totoros es que de fantasmas o entidad similar se trata,además es curioso ver como los padres japoneses creen y alientan a sus hijos,cuando ellos relatan que han visto o son visitados por ellos.
ResponderEliminarLos padres creen en estas presencias más que los propios niños, a diferencia de los padres occidentales que negamos el cuco cuando el niño está siendo despedazado por él.
Mi amigo Totoro, se parece a varios funcionarios de la legislatura, dicen que están pero nadie los ve... y sus panzas son redondeadas gracias a los festines que se dan a diario con los 14000 mangos que cobran, sin que nadie los pueda ver... ¿trabajar?
ResponderEliminarLos fantasmas no trabajan solo asustan a los incautos.
tambien es una demis pelis favoritas , esta en mi top 5 , es encantador , y el gatobus lo mas,,
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